El Universal ha publicado una noticia referente a que la Asmablea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) va a comprar 66 iPad de Apple, que estarán disponibles a la venta en México a partir de finales de junio, para los 66 diputados que componen la Asamblea. Cada iPad tiene un valor estimado en entre 500 y 800 dólares (entre 6 mil 600 pesos y 10 mil 560 pesos), es decir, se gastarán entre 33 mil y 53 mil dólares (entre 435 mil y 697 mil pesos).

El argumento es que a partir de agosto sustituirán el uso de 34 toneladas de papel (que representan alrededor de 300 árboles) para sus trabajos legislativos.

Por fortuna para los contribuyentes y espero que sea realmente así, el coste de los iPad y aplicaciones que se instalen serán pagados al final por los diputados asambleístas, pues les serán descontados los costos de éstos de sus sueldos, de contado o bien a mensualidades hasta un lapso de seis meses. Es decir, los contribuyentes solo financiaremos el crédito para la compra de los iPad. Esperemos que efectivamente los diputados paguen hasta el último centavo del costo de estos dispositivos y otros gastos derivados del uso de éstos.

Me pregunto si ya les explicaron a los asambleístas respecto de que los iPad:

• Fueron diseñados para servir principalmente como lectores de libros electrónicos y documentos electrónicos.
• Producir un iPad contamina tanto como producir 100 libros.
• Utilizan un microprocesador Apple A4 (basado sobre ARM), mismo que jamás permitirá instalar MS Windows ni MS Office... Ya me estoy imaginando a uno que otro despistado diputado pidiendo que le cambien el sistema operativo a su iPad...
• Carecen de ranuras USB o lector de tarjetas SD (a menos que se compre por separado el Kit iPad Camera Connection)
• Solo permiten instalar aplicaciones autorizadas por Apple (cuenta de iTunes Store requerida)
• Carecen de soporte para Adobe Flash.
• Como lector de documentos solo sirven para interiores (lectura en exteriores bajo luz del sol es casi imposible)
• Son como usar un iPhone, pero de 9.7 pulgadas.

En mi opinión, para lo que cuestan los iPad y lo limitados que son en cuanto a características, mejor hubieran pensado en ultra-portátiles (netbooks) de 400 dólares (las hay incluso más baratas) mejor equipadas y versátiles. ¿Será que esto solo ha sido un pretexto para que los diputados asambleístas se compren un iPad, el aparatito de moda? ¿Serán los iPad herramientas útiles para el trabajo legislativo o solo se convertirán en algo que los distraerá de sus responsabilidades diarias?

Les invito a hacer comentarios al respecto.

Fuente de información: El Universal.