El salario promedio de un director ejecutivo en EE.UU. es de 11.4 millones de dólares a anuales. 343 veces más que un empleado promedio de EE.UU.

Sin duda alguna, ésto es algo para meditar largamente, considerando la tasa de desempleo de EE.UU., que actualmente indica que en EE.UU. hay 25 millones de personas sin trabajo.

De acuerdo a la Reserva Federal de EE.UU., durante 2010, las corporaciones, las mismas que están poco a poco han acrecentado su poder e influencia sobre los gobiernos del mundo, tuvieron ingresos récord por mil 930 billones de dólares (es decir 1,930,000,000,000,000, lo que para el mundo de habla inglesa son 1.93 trillones).

Lo desagradable del dato es que lejos de invertir este dinero para expandir sus propias compañías, hace crecer la economía y generar empleos bien remunerados, los directores ejecutivos literalmente acaparan el efectivo de sus compañías, excepto cuando se trata de sus propios cheques para pagar sus millonarios salarios.

Durante 2010, un director ejecutivo promedio de las compañías que integran el índice Standard & Poor's 500, ganó casi 11.4  millones de dólares al año, sumando su sueldo y otras compensaciones. Si solo se tomase en cuenta a las 299 compañías que reportaron recientemente sus datos de pagos de salarios, hablamos de 3 mil 400 millones de dólares (poc más de 40 mil millones de pesos), que pudieron servir para pagar a 102 mil 235 trabajadores con salario medio.

Afortunadamente y la Reforma Dodd-Frank de Wall Street y el Acta de Protección al Consumidor (de EE.UU.), existen herramientas que ayudarán a limitar el desmedido apetito de los directores ejecutivos. Los accionistas ahora pueden votar par aprobar las compensaciones a los ejecutivos y las compañías tienen ahora la obligación de revelar la proporción del salario del director ejecutivo en relación a sus trabajadores.

Fuente de información: Movimiento Americano de Sindicatos.