Sandford Wallace, Adam Arzoomanian y Scott Shaw fueron demandados en febrero pasado por Facebook por haber obtenido de manera ilegitima, durante noviembre de 2008, las credenciales de acceso de varias cuentas, que luego fueron utilizadas para enviar spam a los amigos y contactos de estas cuentas. El spam vinculaba o bien a sitios de engaño (phishing) o sitios comerciales que pagaron a los acusados por enviarles tráfico. Por lo anterior, un juez concedió que los acusados deben pagar 711 millones de dólares a Facebook por los daños ocasionados, de acuerdo a los 50 dólares por violación que establece el Acta de Spam de EE. UU. (CAN-SPAM-ACT).

Facebook espera poder inicial una acción criminal por separado para condenar a prisión a los acusados. Wallace se declaró en bancarrota ante la Corte de Bancarrotas del distrito de Nevada a principios de año, aunque su petición fue denegada. La Corte de Distrito del Distrito Norte de California ha enviado una solicitud al Fiscal General de EE.UU. para perseguir a Wallace por cargos criminales, debido a que Wallace violó una orden de restricción temporal emitida en 2 de marzo y que fue autorizada el 24 de marzo, la cual le prohibía a Wallace, Arzoomanian y Shaw realizar actividades de Spam y engaños en Facebook.

Previamente, en mayo de 2008, Wallace fue encontrado culpable de violar la CAN-SPAM-ACT y se le ordenó pagar 230 millones de dólares por enviar spam y engaños (phising) en MySpace, el cual principalmente involucraba sitios de apuestas, tonos para móviles y pornografía.

Fuente: ComputerWorld.